En un mundo que está más interconectado que nunca, la colaboración activa de las empresas especializadas con todos sus grupos de interés es necesaria para abordar nuevos retos y ofrecer el modelo de gestión que demandará la sociedad del futuro.
Una colaboración fructífera
El sector del agua en España es un buen ejemplo de colaboración público-privada. La experiencia está demostrando que, con esta fórmula, se llevan a cabo proyectos en un menor espacio de tiempo y con ahorros de coste considerables, aprovechando los conocimientos técnicos y la experiencia de las empresas.
Aqualia lleva a cabo estas colaboraciones en 1.100 municipios de 22 de países, más de 800 en ayuntamientos españoles. Un ejemplo de esta colaboración y sus resultados es la ciudad de Almería, donde Aqualia acaba de cumplir 25 años de gestión conjunta con el ayuntamiento. En esta localidad se ha acometido un completo plan para dotarla de un servicio moderno, optimizando los recursos disponibles.
El desarrollo de un Plan de Inversiones en varias fases ha permitido incorporar mejoras en las infraestructuras que han supuesto una optimización en el uso del agua. Gracias a la sectorización de la red, sistemas de detección de fugas y campañas de concienciación ciudadana, se ha reducido en un 50% el volumen de agua suministrada. En 1993, Almería contaba con 160.000 habitantes a los que se suministraban 30 hm3 al año. 25 años después, la población ha crecido hasta los 200.000 habitantes, pero el volumen de agua suministrado se ha reducido a 16 hm3 anuales. Un claro ejemplo de eficiencia.
La implantación del GAP en Salamanca ha supuesto un ahorro equivalente al consumo anual de agua de una población de 15.000 habitantes
Además, Almería fue la primera ciudad española en la que Aqualia implantó el Sistema de Gestión Inteligente, un servicio de software orientado a la gestión de redes que permite mejorar la eficiencia de la red de distribución a la vez que brinda herramientas para la planificación a corto y medio plazo.
Junto a estas mejoras técnicas se han incorporado novedades en los canales de comunicación con los clientes, implantando un servicio omnicanal para poder atender al ciudadano 24 horas al día, los 365 días al año. Con la omnicanalidad se cumple uno de los objetivos prioritarios en materia de Gestión de Clientes, facilitándole la realización de todo tipo de trámites a través de la comunicación telemática y con la única finalidad de su satisfacción y hacerle más fácil su día a día.
Superados estos retos, el Servicio ha crecido de la mano y con la colaboración del Ayuntamiento de Almería y juntos siguen trabajando en abordar nuevos retos acordes con los nuevos tiempos y relacionados con la economía circular: reducción de huella de carbono, regeneración de aguas usadas o uso de fuentes renovables de energía, entre otras actuaciones.
Juntos por la I+D+i: proyectos reales por un futuro sostenible
La actividad investigadora tiene un papel protagonista en la gestión del agua para desarrollar nuevas tecnologías que garanticen agua de calidad, con procesos más sostenibles. Aqualia colabora de forma activa con organizaciones científicas, universidades, empresas y organizaciones, con grandes resultados.
Las inversiones en I+D+i realizadas por Aqualia, dentro de programas que cuentan con ayudas españolas y europeas, están permitiendo investigar para propiciar un cambio radical de los procesos de depuración de aguas. Muchos de estos proyectos están orientados a eliminar los contaminantes del agua residual que todos producimos en nuestros hogares, y transformarlos en biogás para otros usos.
Estos trabajos de investigación permitirán en el futuro cambiar completamente los sistemas actuales de depuración desde el consumo de energía a la producción neta. En esta línea se sitúa el proyecto SMART Green Gas en el que, a partir de las aguas residuales, se ha obtenido biogás para producir energía eléctrica. Ello permite, por un lado, un ahorro de coste energético en las instalaciones de saneamiento y, por otro, obtener un producto concentrado y limpio de impurezas que sirva de combustible autóctono generado a partir de residuos y cuyo impacto en huella de carbono es cero.
En la depuradora de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) se ha puesto en marcha el primer prototipo industrial del proyecto Life Memory. Los resultados de la investigación permitirán reducir la huella de carbono disminuyendo el consumo de energía eléctrica (y por tanto las emisiones de CO2) e implementar los principios de la economía circular en el tratamiento de las aguas residuales mediante la producción de biogás y de agua regenerada.
Comprometidos con cada municipio
La colaboración público-privada facilita en numerosas ocasiones llevar a cabo soluciones concretas a necesidades específicas. Los operadores, en estos casos, realizan las inversiones necesarias y aportan su experiencia, conocimiento y tecnología disponible.
Un ejemplo de esta situación es Salamanca, donde Aqualia, en colaboración con el Ayuntamiento, ha implantado un Sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP) para dar respuesta a una necesidad concreta de la red de abastecimiento de la ciudad, consiguiendo reducir un 48% las averías en la red.
La red de distribución de agua potable de la ciudad de Salamanca cuenta con más de 400 kilómetros de tuberías de diversos materiales y diámetros. Dos tercios son de fundición dúctil, pero todavía queda una tercera parte de fibrocemento, las más antiguas y las que protagonizan la mayoría de averías e incidencias. Para detectarlas y prevenirlas, el Ayuntamiento, a través de Aqualia, puso en marcha el Sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP).
En Almería se ha acometido un completo plan para dotarla de un servicio moderno, optimizando los recursos disponibles
Para la implantación del GAP se han llevado a cabo importantes actuaciones previas, entre las que destaca la mejora de la sectorización de la red, que ha pasado de 7 sectores sin regulación a 23 sectores, 10 de los cuales disponen de regulación activa de presión. El centro de control y visualización, ubicado en las oficinas centrales de Aqualia en Salamanca, recibe más de 10.000 datos diarios de toda la red de agua de la ciudad. Los datos, una vez analizados, permiten la toma de decisiones para mejorar el servicio, minimizar perdidas, evitar averías y el número de usuarios afectados.
Los resultados están siendo muy satisfactorios. De enero a octubre de 2018, las averías registradas en la red de abastecimiento salmantina han sido 79, lo que supone un 48% menos que en las mismas fechas del año pasado (153). Además, la implantación del GAP ha generado que la potabilizadora de Salamanca, en ese mismo periodo, haya necesitado producir un millón de m3 de agua menos que en el mismo periodo del año anterior. Esto supone un ahorro equivalente al consumo anual de una población de 15.000 habitantes. Además, y como beneficio adicional, el sistema incrementará la vida útil de las tuberías en gran parte de esos más de 400 kilómetros de redes del sistema de abastecimiento de Salamanca.
Alianzas con el tercer sector
La misión y el compromiso con los ciudadanos va más allá de gestión del agua y se orienta a generar también un beneficio social. Aqualia colabora con diferentes ONG en proyectos muy diversos que tienen como fin favorecer iniciativas vinculadas a los territorios donde la empresa presta servicio en favor de esas comunidades.
Un claro ejemplo de compromiso con la sostenibilidad son las campañas de concienciación y uso responsable que Aqualia desarrolla en numerosos municipios del territorio. Uno de los casos de éxito es el que se desarrolla en las Islas Baleares. Allí, Aqualia forma parte de la “Alianza por la gestión sostenible del agua de Ibiza y Formentera”, organización integrada por representantes de las administraciones públicas, órganos privados, sociedad civil, sector hotelero y agrícola, entre otros.
Uno de los aspectos en los que la Alianza es más activa es en el de la comunicación y concienciación social. Las Pitiusas es un territorio en el que la actividad turística supone un enorme recurso económico, no siempre debidamente subordinado a garantizar la sostenibilidad medioambiental del entorno. Bajo esta premisa, la Alianza lleva tres veranos poniendo en marcha la campaña "Enjoy The Island, Save Water". La acción, que incluye herramientas como: folletos; adhesivos en bares, restaurantes, comercios y coches de alquiler; colgadores para las puertas de las habitaciones de los hoteles; y anuncios en las marquesinas de los autobuses, alcanza una gran repercusión social. Esta campaña obtuvo en 2017 el reconocimiento de la asociación Forética dentro de la iniciativa “Vida sostenible en ciudades” y en la categoría “Comunicación y sensibilización”.