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"La llegada de las aguas del trasvase ha supuesto una riqueza de 2.500 millones de euros al año"

En este 2019 se cumplen cuatro décadas de la puesta en marcha de una de las infraestructuras hidráulicas más relevantes de la geografía española: el trasvase Tajo-Segura. Este acueducto ha permitido llevar agua a una región semiárida contribuyendo a fijar la población y posicionar a la agricultura de regadío como principal motor económico de la región. 100.000 empleos dependen directamente de su funcionamiento y 300.000 empleos del sector turístico de forma indirecta.

El 1 de marzo de 1979 fue la fecha señalada para comenzar la explotación de un acueducto que lleva agua de calidad en su mayor parte a los regadíos de tres provincias del levante: Murcia, Alicante y Almería. Desde entonces es su principal fuente del recurso, no sin descartar otras como son el agua desalada o el agua regenerada, donde en Murcia ya reutilizan casi la totalidad del agua depurada.

El 1 de marzo de 2019 se cumplieron 40 años desde la puesta en marcha del trasvase Tajo-Segura. Una infraestructura hidráulica que ha llevado progreso al levante español y ha permitido convertir una zona semiárida en el huerto de Europa.

El Sindicado Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura (SCRATS) es, desde 1982, la entidad de referencia de los regantes de las tres provincias abastecidas, plataforma desde la cual remarcan los éxitos conseguidos y elevan sus demandas a los ámbitos correspondientes.

Lucas Jiménez es su presidente desde diciembre de 2016. Desde entonces, lidera esta institución, para la que se ha marcado tres desafíos a superar en su mandato: la reducción del déficit hídrico, el incremento de la seguridad hídrica y la reducción de los costes del agua y la energía necesaria para transportarla.

Pregunta: Echando la vista atrás, ¿qué motivos llevaron a la construcción del trasvase Tajo-Segura?

Respuesta: El trasvase Tajo-Segura fue contemplado por primera vez dentro del Plan Nacional de Obras Hidráulicas que, dirigido por Don Manuel Lorenzo Pardo, se presentó en 1933 ante las Cortes de la nación, aunque nunca fue aprobado.

Utilizaré, extractándolas, las palabras que daban sentido a aquella propuesta de Don Manuel Lorenzo Pardo para enviar aguas al Sureste de España: “La cuenca del Segura está prácticamente agotada, y sus enormes posibilidades productivas, en estado latente o potencial, en espera de un caudal nuevo que las actualice y las incorpore a la economía nacional". Aquella visionaria idea, así como las argumentaciones que le sirvieron de premisa justificativa, gozan hoy en día de total vigencia.

P.- ¿Qué usuarios son beneficiarios de esta infraestructura?           

R.- Paradójicamente a lo que comúnmente pensamos, que solo los regantes de tres provincias –Alicante, Almería y Murcia– usan estas obras para conducir agua, lo cierto es que coexisten múltiples usuarios, con variedad de usos, que dependen directamente del correcto funcionamiento del acueducto Tajo-Segura.

Paso a relacionarlos a continuación, especificando que, al menos en lo que se refiere a los caudales derivados al Levante, siempre hablamos de cifras anules ideales, es decir, potencialmente trasvasables, sujetas a la normativa vigente y alejadas de una realidad que, año hidrológico tras año hidrológico, impide enviar esos volúmenes:

  1. Unión Eléctrica Madrileña (hoy Naturgy), con el aprovechamiento energético de la central hidroeléctrica reversible de Bolarque II.
  2. Riegos del Sudeste con aguas trasvasadas (SCRATS), con 400+21 hm³/año
  3. Abastecimientos del Sudeste con aguas trasvasadas (Mancomunidad de los Canales del Taibilla –MCT–), con 110 hm³/año, y GALASA, en Almería (9 hm³/año):
    • Abastecimientos del Taibilla (110 hm³/año):
      • Albacete: 2 Municipios
      • Alicante: 34 Municipios
      • Murcia: 43 Municipios
    • Abastecimientos GALASA (9 hm³/año):
      • Almería 12 Municipios
  4. Riegos del Sudeste con aguas propias, con 87,35 hm³/año
  5. Abastecimientos del Sudeste con aguas propias, con 21,67 hm³/año
  6. Suministro a las Tablas de Daimiel desde el Alto Tajo, con 19,91 hm³/año
  7. Abastecimientos del Guadiana desde el Alto Tajo, con 29,86 hm³/año
  8. Compensación a los Llanos de Albacete (riegos) por filtraciones del túnel de Talave, con 4,17 hm³/año
  9. Compensación a Hellín (riegos) por filtraciones del túnel de Talave, con 4,17 hm³/año
  10. Suministro del Júcar para riegos de los Llanos de Albacete (sustitución parcial de bombeos en La Mancha Oriental), con 39,3 hm³/año
  11. Suministro del Júcar para abastecimiento de Albacete, con 24 hm³/año
  12. Suministro del Júcar para abastecimiento del Sudeste, con 3,64 hm³/año como posible apoyo al abastecimiento de MCT en Alicante y fuera de la cuenca del Segura.

P.- ¿Qué ventajas presenta frente a otras alternativas como las aguas subterráneas, la desalación o la reutilización?

R.- Todas las fuentes de recursos hídricos son contempladas en los regadíos del trasvase y forman parte del conglomerado funcional del día a día. La experiencia nos habla de acuíferos sobreexplotados en su mayor parte con una calidad de aguas media y, en muchos casos, no apta para riego, salvo que se someta a diversos procesos de mejora, como su mezcla con otros recursos, como así sucede. En concreto, de las 63 masas de agua subterránea de la cuenca del Segura, 17 están en buenas condiciones y 46 en mal estado, ya sea por su situación de sobreexplotación, por motivos cuantitativos o por los derivados de la insuficiente calidad de sus aguas.

En lo que a reutilización de aguas depuradas se refiere, la labor de las administraciones autonómicas ha sido encomiable durante estas décadas, arrojando cifras de uso de aguas de esta procedencia que rozan el 98% de los efluentes en la Región de Murcia, mayoritariamente con destino agrícola y en menor proporción destinados a usos recreativos. Según datos de la propia Confederación Hidrográfica del Segura, para el horizonte 2015-2021, se prevé la reutilización de 124 hm³/año (un 8% de la demanda bruta total del regadío ligado a esta cuenca).

Todas las fuentes de recursos son contempladas en los regadíos del trasvase y forman parte del conglomerado funcional del día a día

La desalación forma parte, desde hace años, de ese compendio de recursos que barajan nuestros regadíos. SCRATS, en colaboración con la Universidad Politécnica de Cartagena, viene desarrollando estudios tendentes a analizar el uso –desde diferentes escenarios definidos por proporciones– del agua desalada en los cultivos y en las tierras. La presencia de boro y la ausencia de elementos como magnesio y calcio nos lleva a pensar en la complementariedad –al menos de momento– de estas aguas con respecto a otro tipo de recursos, permitiendo que la mezcla dé como resultado un agua apta para todo tipo de cultivos. Añadir, como contraindicación importante, el elevado coste que resulta para el usuario. No todos los cultivos, ni todas las explotaciones –especialmente las pequeñas y medianas– pueden asumir el incremento de coste por metro cúbico que supone la utilización, en exclusiva, de este recurso. Creo que el agua desalada es una opción más, que aporta garantía en los momentos en los que el trasvase se ve muy mermado o se hace imposible, pero no se puede, de ningún modo, hablar de recurso opcional ni sustitutivo al trasvase Tajo-Segura.

 

  • "La llegada del trasvase a nuestras regiones supuso el fin del éxodo rural al que se veía abocada gran parte de nuestra población"
  • "Los regantes hemos asistido a demasiados debates políticos fratricidas en torno a la existencia y permanencia del trasvase Tajo-Segura"
  • "Se hace precisa acción legislativa tendente a corregir la injusticia derivada de vivir en unas regiones del país alejadas de la bondad hídrica"

P.- Tras 40 años de su puesta en marcha, ¿cuál ha sido el impacto económico del trasvase Tajo-Segura?

R.- Según un minucioso estudio encargado por SCRATS a la consultora PwC, se calcula que la llegada de las aguas del trasvase el 31 de marzo de 1979, habría supuesto una generación de riqueza anual de aproximadamente 2.500 millones de euros al año. Lo que supondría, en 40 años de funcionamiento de la infraestructura, una riqueza equivalente a 100.000 millones de euros hasta la fecha. El armazón de los regadíos surgidos a raíz de la entrada en funcionamiento del acueducto es responsable directo de una incesante actividad agroalimentaria, única en Europa, que arrojó en el año 2016 excelentes cifras en producción hortícola y frutícola:

P.- ¿Y en el ámbito social?

R.- La llegada del trasvase a nuestras regiones supuso el fin del éxodo rural al que se veía abocada gran parte de nuestra población, que tenía en él la única vía de consecución de empleo que garantiza una vida digna, difícil de conseguir en nuestras tierras. Dejamos de emigrar y pasamos a ser regiones de progreso gracias al agua del trasvase.

A partir de los años 80 se produce un proceso de crecimiento poblacional, vinculado indiscutiblemente a la seguridad hídrica, que permitía pensar en desarrollo en los municipios de las tres provincias regadas por el acueducto. Así, mientras en el conjunto del país los municipios, según datos del INE con indicadores de la franja temporal 1970-2012, crecieron un 35,5% aproximadamente, los de las provincias receptoras del trasvase lo hacían a un ritmo mucho mayor: Alicante al 113%; Almería a un 87,8% y Murcia a un 77,2%.

Hoy en día, aproximadamente 100.000 empleos están relacionados directa o indirectamente con el sector primario, más otros 200.000 puestos de trabajo que, con la garantía del trasvase, se mantienen en el sector turístico.

P.- Para completar el análisis de todos los efectos de esta infraestructura, ¿cuál ha sido y es su impacto en el medio ambiente?

R.- El paisaje semidesértico se erradicó, en parte, con la presencia de 44 millones de árboles frutales y 70.000 hectáreas de hortícolas, una figurativa alfombra verde. Los regadíos del trasvase actúan como auténtico e irreemplazable sumidero de CO2.

Cabe decir que nuestros regadíos deben considerarse como un sector proactivo que, con un principio enraizado en la imitación de la naturaleza y unos valores medioambientales intrínsecos, ayudan a paliar el exceso de CO2 en la atmósfera, actúan como una eficaz barrera frente al avance del desierto y conforman un ciclo biológico, los alimentos como producto final, que es económica, social y medioambientalmente sostenible.

Ítem más y como reflejamos antes, la infraestructura se convierte en garante, en caso de necesidad de auxilio, al Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.

 

Madrid celebra el 40 Aniversario del Tajo-Segura: "A día de hoy no hay alternativa viable"

La situación del Campo de Cartagena, la conexión de las desaladoras y la reutilización del agua, los retos del sistema Tajo-Segura.

P.- Los poderes políticos, autonómicos y nacionales, ¿son conscientes de la importancia del trasvase Tajo-Segura para la economía del levante?

R.- Considero que la respuesta a esta pregunta es afirmativa. No reconocer la labor de trabajo y defensa del acueducto de nuestros políticos sería, amén de injusto, un desatino estratégico. Nuestros políticos levantinos han demostrado, cada vez que han tenido la ocasión, un apoyo sin fisuras.

Desde su puesta en funcionamiento, los regantes hemos asistido a demasiados debates políticos fratricidas en torno a la existencia y permanencia del trasvase Tajo-Segura, que como denominador común han tenido la ausencia de contenido pragmático o técnico. Infraestructura pensada, iniciada y concluida caminando, de puntillas, sobre el devenir político-social, de tres regímenes políticos dispares entre sí: República, Dictadura y Monarquía Parlamentaria. Una obra de Estado, a quien por cierto le competen las cuestiones que le afectan y regulan. El principal peligro está en una mal entendida política regionalista que disgrega las soluciones posibles y empeora la situación de todos los afectados. Confundir cuencas hidrográficas con límites de comunidades autónomas es un error habitual, consecuencia directa de esa política regionalista que ve en el agua una fuente de captación de votos, siendo en realidad recurso del patrimonio nacional.

P.- La aplicación del acuerdo entre el entonces ministro Arias Cañete y los presidentes de las comunidades autónomas afectadas por el trasvase en 2013, así como el reglamento desarrollado después, ¿han sido satisfactorios?

R.- Lo que se dio en denominar “Ley del Memorándum” trajo ciertamente seguridad jurídica en cuanto a la aplicación de las reglas de explotación del trasvase. Además, posibilita planificar, aunque sea mínimamente, los recursos con los que va a contar el agricultor a lo largo del año hidrológico, extendiendo así la duración del consumo hasta la finalización del curso hidrológico, lo que antes no sucedía.

"La “Ley del Memorándum” trajo ciertamente seguridad jurídica en cuanto a la aplicación de las reglas de explotación del trasvase"

La experiencia ha demostrado que en el nivel tres de las reglas de explotación, queda un amplio margen de discrecionalidad en manos de la Administración a la hora de tomar la decisión de trasvasar o no. Como nota negativa también, considero que el umbral del límite no trasvasable se elevó demasiado.

P.- En referencia a la reciente sentencia del Tribunal Supremo mediante la que se anula el plan hidrológico de la cuenca del Tajo por falta de fijación de los caudales ecológicos en Aranjuez, Toledo y Talavera del Reina, ¿cómo cree que afectará a la explotación del trasvase Tajo-Segura?

R.- Se han dictado varias sentencias relativas a la fijación de caudales ecológicos. En todas ellas, el TS, como denominador común, al declarar la nulidad de algunos artículos, deja un vacío legal en el Plan Hidrológico del Tajo que no sé cómo se resolverá salvo ajustándose al procedimiento establecido de planificación.

En cualquier caso, los caudales ecológicos son una decisión política. No están amparados en la Directiva Marco del Agua que sí afirma que es necesario salvaguardar la calidad de las masas de agua.

La Sentencia del Tribunal Supremo prescribe algo de sobra conocido, que el Plan del Tajo pospuso y el articulado de esta mora es lo que ahora anula dicha sentencia: la obligación de establecer un régimen de caudales completo. Esto puede entenderse, en línea de máximos, con los criterios de la IPH, esto es, caudales máximos, mínimos, tasa de cambio y caudales generadores, o quedarse, en línea de mínimos, en la fijación de mínimos estacionales, que podrían ser superiores o inferiores a los 6 m³/s actuales en Aranjuez.

No hay nada más en las sucesivas sentencias que han ido saliendo, salvo una validación expresa de la legislación que regula el trasvase, las leyes del Memorándum y del RD 773/2014, rechazando las demás,pues rechaza todos los demás anhelos de los recurrentes, negando la posibilidad de fijar caudales más altos como pedían, los fijados en el ETI-2010 del Plan del Tajo.

 

 

40 Aniversario trasvase Tajo-Segura

El IIES acogió el pasado 8 de mayo de 2019 una jornada con motivo de la celebración del 40 aniversario del Trasvase Tajo-Segura, promovida por la Cátedra Cátedra Trasvase y Sostenibilidad José Manuel Claver Valderas y SCRATS.

P.- Como comentaba en la introducción, la agricultura es uno de los usuarios más relevantes del caudal que aporta el trasvase. ¿Qué porcentaje de los recursos hídricos del trasvase se destina a la agricultura?

R.- Idealmente, 421 hm3 anuales, si las reservas estuvieran en el óptimo numérico de hectómetros cúbicos fijado por las reglas de explotación. La realidad marca que la media está en aproximadamente 183 hm3 anuales.

Aunque la legislación preveía que el 78% del agua derivada anualmente a través del acueducto tendría como destino el uso agrícola, lo cierto es que la estadística marca que el 63% ha ido a parar al regadío y, el resto, el 37%, al abastecimiento, debido a la prioridad de este en el disfrute del recurso.

P.- ¿Qué precio está pagando el regante por el agua? ¿Qué peso tiene la electricidad en la factura del agua?

R.- De las aguas trasvasadas, y en el año hidrológico 2017/18, los regantes recibieron 110,7 hm³, abonando por este volumen un total de 22,54 millones de euros. El precio resultante ascendió por tanto a 0,204 €/m³. Si la tarifa se hubiese aplicado, como venía ocurriendo desde el origen de la misma, por suma de sus tres componentes habría resultado a razón de 0,1178 €/m³.

El coste eléctrico de las aguas trasvasadas para regadíos, costes variables a razón de 0,087 €/m³, ha supuesto en este periodo el pago de 9,63 millones de euros, un 43% del importe satisfecho por la tarifa total.

De las aguas desaladas de la IDAM de Torrevieja, las Comunidades de Regantes satisfacen el consumo a razón de 0,6248 €/m³.

La política de costes está sangrando las economías del Levante. Soportamos los precios más elevados por metro cúbico. Sin parangón, en lo que se refiere al ámbito de regadío, en relación con los usuarios del resto del país.

Pero es que incluso la economía doméstica, industrial y comercial soporta costes alejados de lo que sus homónimas pagan en España. Se hace precisa acción legislativa tendente a corregir esta injusticia derivada de vivir en unas regiones del país alejadas de la bondad hídrica.

"Un 80% de los regadíos del trasvase están modernizados y la práctica totalidad del porcentaje restante en vías de modernización"

Siempre entendimos que la relación entre prestación y contraprestación era el nexo de unión que servía de base de una tasa, lo que desde hace un año y medio nos aplican. Con la implantación del nuevo modelo tarifario por el agua del trasvase, es simple y llanamente un impuesto revolucionario. Impuesto a Alicante, Almería y Murcia que suma la nada desdeñable cantidad de 18,7 millones de euros al año (12,9 millones a pagar por los regadíos y 5,8 millones a satisfacer por los hogares y negocios) aún en el caso de que no recibiéramos volumen de agua alguno, por mor de las reglas de explotación, que en el caso del nivel tres de las mismas podría depender de la voluntad arbitraria del Ministerio.

P- ¿Qué porcentaje del regadío que recibe agua del trasvase está modernizado?

R.- En torno a un 80% de los regadíos del trasvase están ya modernizados y la práctica totalidad del porcentaje restante en vías de modernización. Modernización implica, ineludiblemente, sostenibilidad, ahorro de agua en definitiva. En el Levante, los regadíos vinculados al trasvase hicieron, desde sus primeros pasos, de la sostenibilidad su bandera por dos motivos primordialmente: la inseguridad y escasez de llegada de caudales y el excesivo coste pagado por los mismos.

Estos dos motivos por sí solos sirvieron de acicate a las Comunidades de Regantes afectas al Sindicato Central y a los propios agricultores para implementar todo tipo de medidas tendentes al ahorro y control del agua recibida. En estas tierras se han investigado y adaptado todo tipo de avances en gestión mínima del agua. Podemos afirmar que pocas regiones en el mundo presentan un grado de introducción de medidas técnicas de ahorro de agua como las del Levante español.

Así fue la jornada del 40 Aniversario del Trasvase Tajo-Segura

Más de 100 asistentes se dieron cita en el Instituto de Ingeniería de España en Madrid para conmemorar el 40 Aniversario del Trasvase Tajo-Segura.

Así fue la jornada del 40 Aniversario del Trasvase Tajo-Segura

P.- Para concluir la entrevista, ¿cuáles son los retos a los que se enfrentan los regantes receptores del agua procedente del trasvase Tajo-Segura?

R.- Básicamente tres: déficit, seguridad hídrica –en parte paliada con desalación y reutilización de aguas depuradas– y costes.

P.- ¿Qué legado le gustaría dejar al concluir su presidencia en SCRATS?

R.- A la presidencia de SCRATS se llega como a una partida empezada de ajedrez: con muchos movimientos ya realizados y pensando muy bien lo que ha de hacer uno para no estropear la jugada siguiente y global del resto de jugadores que, con el paso de los años, llegarán a tomar los mandos del tablero de dicha partida. 37 años de defensa directa de los intereses de los regantes levantinos e, indirectamente. de los del resto de la ciudadanía. Ese es el legado, no mío ni de ningún otro presidente, no es una labor personal sino colectiva. Una labor en la que, amén de la Junta de Gobierno y las 80 comunidades de regantes que integran al Sindicato, este ha sabido incardinar a la ciudadanía –a la que estamos inmensamente agradecidos–, a la empresa, al comercio, al periodismo, a parte del mundo universitario y a la política local y regional de este Levante “suresteño”. Sin duda, porque el trasfondo de nuestras reivindicaciones, amén de afectar a todos en mayor o menor proporción, es justo.

Personalmente, me gustaría que durante mi mandato se pudieran fijar, al menos, las bases de resolución de los retos mencionados en la pregunta anterior.

En lo que al déficit estructural de la cuenca del Segura y de los regadíos del trasvase se refiere, el SCRATS, dispone –así como el propio Ministerio– de un estudio serio, realizado por una de las ingenierías más prestigiosas del país, el cual ha arrojado finalmente distintas soluciones a corto, medio y largo plazo para erradicar el déficit estructural del Segura, de 400 hm³/año en un año de “normalidad hidrológica”. Déficit que se duplica en los recurrentes periodos de sequía como el que padecemos en la actualidad, siendo por ello absolutamente necesario dar a sus regantes una garantía suficiente para que puedan seguir con su actividad y desarrollo con seguridad.

"Los regantes hemos asistido a demasiados debates políticos fratricidas en torno a la existencia y permanencia del trasvase Tajo-Segura, que como denominador común han tenido la ausencia de contenido pragmático o técnico"

En el mismo, y una vez comprobada la muy escasa mejora que se puede conseguir por la más eficaz utilización de los recursos propios de esta cuenca, se han analizado soluciones viables que, en un plazo relativamente breve y de una forma razonable, podrían ayudar a reducir este déficit. Entre las mismas cabe destacar, en síntesis, las siguientes:

El incremento de producción de las desalinizadoras existentes hasta su máxima capacidad prevista y puesta a disposición de sus caudales para los regadíos dependientes del trasvase, lo que podría ofrecer unos 140 hm³/año adicionales, ya formalmente solicitados aunque con algunos inconvenientes, como son su alto coste, que es inasumible por el regadío, y por lo que se precisa llegar a una fórmula adecuada para su disminución a precios equitativos con el resto de España o al menos razonables para mantener la actividad económica; y también la necesidad de mezcla con aguas continentales para que el sistema de explotación de la cuenca equilibre y mejore la calidad y cantidad de los recursos. Por el contrario, estas aguas ofrecerían una cierta garantía de suministro, pero todavía insuficiente para cubrir las necesidades existentes.

Cesiones de derechos intercuencas con menos limitaciones administrativas o legislativas y acceso a aguas temporalmente no utilizadas en demarcaciones vecinas (Júcar-Vinalopó).

A largo plazo, y como soluciones definitivas que puedan erradicar el déficit, y con garantía hiperanual, se plantean en este estudio distintas posibilidades de derivación de aguas hacia el Segura con el objetivo de alcanzar 400 hm³/año adicionales en la misma, entre las que se contemplan como cedentes fuentes desde el Ebro, Duero o Tajo, y con distintas variantes, todas ellas técnica, social y medioambientalmente asumibles.

Publicado en iAgua Magazine 23 - Junio 2019
iAgua Magazine 23