ACS puja por el contrato de construcción de una planta de tratamiento de residuales al Oeste de Canadá, en el Estado de British Columbia, un proyecto presupuestado en unos 260 millones de dólares (unos 203 millones de euros).
El grupo que preside Florentino Pérez es uno de los tres que ha resultado seleccionado por las autoridades de la región para presentar oferta al proyecto, del total de ocho que inicialmente se interesaron por el mismo.
Los otros dos consorcios con los que competirá ACS están liderados por Suez y Veolia, respectivamente, según el listado de oferentes invitados a participar publicado por Capital Regional District (CRD), el Gobierno regional de trece municipios del Este de Vancouver.
En caso de lograr este proyecto, ACS reforzaría la presencia con que ya cuenta en Norteamérica, fundamentalmente con sus negocios de construcción y concesiones. El grupo español compite por la planta a través de su filial Dragados Canadá y en alianza con Knappett Projects. El Capital Regional District ha dado de plazo hasta enero de 2014 a los tres grupos para que remitan sus respectivas ofertas por la planta, con el fin de seleccionar un adjudicatario en la primavera del próximo año. De esta forma, la construcción de la instalación podrá arrancar el próximo verano y entrar en funcionamiento en 2018. La planta será la base del sistema de tratamiento de AGUAs residuales de toda la zona. Se ubicará en la localidad de Esquimalt, concretamente en McLoughlin Point, un lugar donde con anterioridad se ubicaban tanques de petróleo.
La instalación forma parte de un amplio programa de mejora del sistema de tratamientos de AGUA de la zona, presupuestado en un total de 782,7 millones de dólares (unos 603 millones de euros) y que será financiado conjuntamente por los gobiernos provinciales, federales y la CRD. Su diseño deberá contar con soluciones innovadoras, como instalaciones de generación de energía solar. Además, sus edificios administrativos deberán ajustarse a la certificación de sostenibilidad 'LEED Gold'