El 14 de mayo de 2024, el ministerio de Hacienda australiano (The Treasury) anunció su Presupuesto Federal para el periodo 2024-2025, destacando áreas prioritarias como la salud, la educación y las infraestructuras. Sin embargo, las medidas para la gestión y conservación del agua, fundamental en un país afectado por sequías y eventos climáticos extremos, cuentan con especial relevancia tanto en el próximo año fiscal como en los siguientes.
El presupuesto contempla una asignación total de 831,7 millones de dólares australianos (aproximadamente 509 millones de euros) para mejorar la seguridad hídrica y ayudar a los agricultores. Parte de este monto, 519,1 millones de dólares (317 millones de euros), se distribuirán durante ocho años para aumentar la producción agrícola y fortalecer las comunidades rurales. Este último paquete incluye, a su vez, 235 millones de dólares (aprox. 143 millones de euros) que también se repartirán a lo largo de ocho años para combatir la sequía y el cambio climático a nivel local, además de 137,4 millones de dólares (cerca de 84 millones de euros) en cinco años para medidas preventivas. Otros 120,3 millones de dólares (aprox. 73 millones de euros) se asignarán en seis años para promover prácticas agrícolas innovadoras y la gestión de la tierra.
El Fondo Nacional de la Red de Agua (National Water Grid Fund, en inglés), dedicado a la financiación de proyectos de infraestructura hídrica, contempla la inversión de 174,6 millones de dólares australianos (aprox. 106,6 millones de euros) durante seis años, abarcando desde proyectos de construcción hasta investigaciones científicas. Además, se destinarán a posteriori 592,3 millones de dólares (aprox. 362 millones de euros) para mejorar los proyectos existentes como la Presa de Paradise (Paradise Dam), la Presa de Big Rocks (Big Rocks Weir) y el Plan de Irrigación de Huhgenden (Huhgenden Irrigation Scheme).
El Gobierno también asignará 262,2 millones de dólares australianos (alrededor de 160 millones de euros) durante cinco años a lo que denominan «Funciones Sostenidas del Agua» (Sustained Water Functions, en inglés), incluyendo la ejecución del Plan de la Cuenca del Murray-Darling (Murray-Darling Basin Plan), proyectos de ahorro de agua en la Cuenca de Great Artesian (Great Artesian Basin) y la integración de funciones del mercado del agua en la Comisión Australiana de Competencia y Consumidores (Australian Competition & Consumer Commission).
La implementación del Plan de la Cuenca de Murray Darling, la red fluvial más extensa y compleja de Australia, también recibe una atención especial en el presupuesto federal. Durante cinco años, se destinará financiación para diversas acciones, como el Programa de Infraestructuras Hídricas de Ríos Resilientes (Resilient Rivers Water Infrastructure Program o RRWIP, por su sigla en inglés) y mejoras del hábitat de las aves y humedades en Coorong, entre otras.
Por último, según el presupuesto, Troy Grant, el Inspector General del Cumplimiento Normativo del Agua, recibirá una financiación de 28,6 millones de dólares (aproximadamente 17,5 millones de euros) durante cinco años a partir de 2024-2025. Con un conjunto de delegaciones según lo establecido en la Ley de Agua de 2007 (Water Act 2007), utilizará estos fondos para llevar a cabo investigaciones, supervisiones y actividades de participación pública.
En conclusión, el presupuesto federal de Australia para 2024-2025 prioriza la resiliencia hídrica y agrícola, con inversiones dirigidas a enfrentar el cambio climático y mejorar el suministro de agua. Estas medidas reflejan un compromiso con la sostenibilidad y el bienestar de las comunidades actuales y futuras.
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