Los propietarios de 214 edificios de Málaga que mantienen su abastecimiento de agua regulado por contadores comunitarios han iniciado este año su sustitución por contadores individuales, en cumplimiento de la Ordenanza Municipal del Ciclo Integral del Agua. La empresa municipal de abastecimiento de agua, Emasa, ha puesto en marcha un Plan de Baterías, destinado a ayudar al cumplimiento de esta Ordenanza, que fija en el 21 de febrero de 2018 el plazo para que las comunidades individualicen el consumo.
En total, Emasa ha abierto 463 expedientes dentro de este Plan, de los que los 214 mencionados han iniciado el proceso, habiéndolo culminado 26 comunidades en 2017. Los datos recogidos por la empresa municipal señalan que la sustitución de contadores ha logrado un ahorro sustancial del consumo de agua de las comunidades que han acometido esta actuación, al registrar con los contadores individuales una disminución del gasto de un 25% (una media de 319 m3 de agua al mes) en comparación con la demanda que tenían con un totalizador.
Con el contador comunitario los vecinos de estas edificaciones tenían consumo medio de 1.292 m3 por mes, mientras que con los contadores individuales la suma de los registros del inmueble sitúa la media en 973 m3 al mes. Las lecturas individualizadas del contador permite a los propietarios realizar un consumo responsable de agua, objetivo final de la implantación de la tarifa por habitante.
El Plan de Baterías de Emasa recoge un apoyo integral a las comunidades de propietarios que necesitan realizar la adecuación de sus instalaciones, para lo que contempla ayudas que, dependiendo de las características de la actuación, pueden ser de 150 o 300 euros por vivienda o local, así como la posibilidad de financiar el resto del presupuesto hasta en 5 años. Para el desarrollo de este Plan, Emasa cuenta con la colaboración de la empresa ICCS, así como con el respaldo de las asociaciones de consumidores y usuarios Facua, Al Andalus y UCE Málaga.
En la actualidad Emasa gestiona un parque de 213.406 contadores en Málaga, distribuido de tres formas: en comunidades con lectores individuales en todas las viviendas, en edificaciones en las que el contador registra el total del agua abastecida a la comunidad y que después se deriva hacia las viviendas (el contrato está a nombre de la comunidad de propietarios) y, por último, en aquellas otras en las que conviven estas dos situaciones, con viviendas abastecidas de forma común y otras con contadores individuales.