En este número de iAgua Magazine lanzamos una nueva sección: El Agua en tu Ciudad, en la que conoceremos de la mano de sus protagonistas el funcionamiento de los servicios urbanos del ciclo integral del agua.
Aunque en futuros números nos centraremos en localizaciones concretas, esta primera entrevista está protagonizada por la puesta en marcha de proyectos hídricos en países que implican cierta dificultad. Eloy Marcos, jefe del departamento de Tratamiento y Calidad del Agua de la Dirección Técnica Internacional de Aqualia, es testigo de primera mano de los problemas y los éxitos de los profesionales españoles allende nuestras fronteras.
Pregunta. - En primer lugar, nos gustaría conocer su trayectoria profesional, sobre todo cómo llegó a su actual puesto en la compañía.
Me incorporé a Aqualia en el año 2010, en una segunda etapa, puesto que anteriormente ya había estado en la Compañía. Aquel fue mi primer trabajo dentro del sector del Ciclo Integral del Agua y me marcó, ya que desde entonces he seguido trabajando en este sector.
“La misión principal de nuestro departamento es la de apoyar a las distintas áreas geográficas de producción en la gestión técnica de los proyectos”
Con mis antiguos compañeros me encontraba en eventos, aeropuertos, etc., y un día me ofrecieron la oportunidad de volver a Aqualia. No lo pensé mucho y me incorporé encantado, ya tenía experiencia en Internacional, en esta clase de proyectos, con casi el mismo equipo anterior y con un reto totalmente ilusionante.
Empecé con el inicio de la gestión de los proyectos de desalación de Argelia y de depuración de Egipto y, después de los primeros años, pasé al Departamento Técnico de Internacional, donde estoy actualmente.
Se ha formado un equipo sumamente profesional, liderado por Rafael Aznar, director Técnico Internacional. Nuestra principal misión es la de apoyar a las distintas áreas geográficas de Producción en la gestión técnica de los proyectos, tanto en la fase de contratación -oferta y presentación de la misma al cliente- como en la fase de producción -arranque de los servicios y el posterior seguimiento técnico-. También participamos en la puesta en marcha de las instalaciones.
P. - ¿En qué países ha tenido la oportunidad de poner en marcha proyectos relacionados con la gestión del agua urbana?
Con Aqualia por el momento he participado en proyectos de diversa índole relacionado con el ciclo integral del agua en Argelia, Egipto, Italia, Emiratos Árabes Unidos, Arabia y México. También he trabajado en otros países como la India, donde nos han adjudicado dos concursos de gestión de agua; Catar, en el proyecto de la depuradora de Al Dhakhira, también ganado por Aqualia; Perú, Chile o Chipre.
P. - ¿Cuáles son las características principales de estos proyectos?
FCC Aqualia gestiona todas las fases del Ciclo Integral del Agua, por lo que los proyectos que estudiamos pueden abarcar aspectos diferentes: depuración, desalación, potabilización o redes de agua y saneamiento.
No obstante, todos son proyectos de un tamaño importante, normalmente complejos y que incluyen las últimas tecnologías en cada instalación.
“Con Aqualia he participado en proyectos de diversa índole relacionado con el ciclo integral del agua en Argelia, Egipto, Italia, Emiratos Árabes Unidos, Arabia y México”
Respecto a los presupuestos, nos adaptamos a toda clase de situaciones, siendo nuestra joya de la corona, el recientemente adjudicado concurso de la depuradora de Abu Rawash en Egipto, con aproximadamente 2.400 millones de euros de cartera.
P. - ¿En qué proyecto trabaja actualmente?
Normalmente trabajamos en equipo y actualmente estamos en el inicio de la explotación de las depuradoras de La Meca (Arabia), recientemente adjudicadas, en una campaña de actualización y modernización de nuestras instalaciones de saneamiento y depuración de Caltaqua (Sicilia, Italia), en unas mejoras en las desaladoras de Argelia y preparando el estudio económico de algunos proyectos en diferentes países.
P. - ¿Se aplica la recuperación de costes en estos emplazamientos? ¿Con qué herramientas?
Trabajamos en toda clase de proyectos, en los de operación y mantenimiento, que tienen una inversión relativamente escasa, y también en los que incluyen financiación de las obras (tipo BOT, BOOT, etc.). En ambos casos, la recuperación de la inversión y de los costes de operación es implícita a la viabilidad del proyecto.
Respecto a los costes del servicio integral de aguas, se observa una gran heterogeneidad según el área geográfica, con países en los que el agua está fuertemente subvencionada, como es el caso de Argelia.
“Recuerdo un trabajo en La India que me impresionó por las condiciones en que se suministraba el agua a la población”
P. - ¿De cuál de estos proyectos se siente más orgulloso y por qué?
De todos, de los que nos adjudicaron y de los que no conseguimos. De todos aprendemos, tanto de los pequeños como de los grandes.
Personalmente, tengo una gran facilidad para ilusionarme con los nuevos proyectos, todos me gustan y si son difíciles, entra mi faceta de cabezota.
Hay proyectos como los de Argelia que recuerdo porque fueron los primeros. Otros, como los de Abu Dhabi o Al Dhakhira han sido especiales por su dificultad. Y el más reciente, el de Abu Rawash, por la implicación que puede tener en la empresa debido a sus enormes magnitudes. Recuerdo un trabajo en La India que me impresionó por las condiciones en que se suministraba el agua a la población y que, una vez ejecutado, mejorarán de forma muy significativa las condiciones de vida de la población.
P. - ¿Cuál es la mayor dificultad a la que se ha enfrentado a la hora de poner un proyecto en marcha?
Teniendo en cuenta el equipo que dispone Aqualia, normalmente las mayores dificultades que tenemos no son producto de los procesos de las plantas, sino de las diferentes características de los países, como puedan ser los derivados de la normativa de contratación, formación del personal local, logística, importaciones, etc.; y de las diferentes nacionalidades que pueden tener el personal local lo que genera diferencias de idiomas, comportamientos, religiones, etc. Por ejemplo, en las depuradoras de Meca tenemos una plantilla de 190 personas procedentes de 16 nacionalidades.
“Las mayores dificultades que tenemos no son producto de los procesos de las plantas, sino de las diferentes características de los países”
El aspecto psicológico y asertivo es de suma importancia a la hora de poder instaurar un equipo con nacionalidades diversas, en un país diferente al nuestro y con plantillas muy numerosas.
P. - Para concluir, cuéntenos alguna anécdota curiosa que le haya sucedido en los últimos años.
Hemos tenido muchas, casi todas producto de las distintas características de los países o de las distintas nacionalidades.
Recuerdo que en una ocasión José Carlos, el responsable de la desaladora de Cap D´Jinet (Argelia), me llamó. Se trataba de un técnico portugués muy profesional pero también muy parco en palabras. Esa noche me llamó sobre las tres de la mañana y me dijo que estaba en la calle porque estaba lloviendo mucho. Mi respuesta fue que se metiera en una caseta y que se cubriera, que se estaba mojando; me insistió en que llovía mucho y le pregunté que por dónde le llegaba el agua y me contestó ¡que por encima de las rodillas! Tuvimos que romper incluso una parte del cerramiento para evacuar el agua, puesto que se había roto una balsa de unos agricultores y se estaba inundando la planta.
