Con la llegada del verano, regresan las típicas preocupaciones pero son invisibilizadas.
Uno de los efectos colaterales que trajo el COVID-19 ha sido el acaparamiento absoluto de los medios de comunicación. Esto, para bien o para mal, ha opacado todos los demás tópicos de nuestro quehacer diario, entre esos temas está el uso razonable del agua potable, más aún ahora en tiempos de verano.
Todos los organismos públicos y privados están enfocados a gestionar la crisis del COVID sin invertir tiempo y recursos en las crisis pre existentes a la pandemia. Seguramente todos los hemos notado.
¿No debería haber un plan de racionamiento para cuidar el nivel de los embalses? ¿Qué ha pasado con las campañas de concientización de uso razonable del vital líquido? Estas y muchas más interrogantes surgen al ver que el tema quedó en el olvido, o al menos esta siendo tratado con muy poca fuerza en los diferentes medios de comunicación.
En lo personal, mientras estoy viajando o en mi propio piso, observo en los aseos por ejemplo, como los PSI de las duchas o lavamanos no bajan, son casi un hidro jet, con lo cual, quieras o no, desperdicias agua. Igual acontece con los sistemas de riego de plantas ornamentales, no hay una mínima regulación. Hy que recordar que por cada minuto abierto el grifo se vierten 12 litros de agua.
La construcción de una conciencia ambientalista y conservacionista no toma vacaciones, no se detiene, porque de detenerse, el proceso se revierte y debemos empezar de cero. Estamos claros que cultivar esa conciencia comienza por casa, con el rol de la familia en la educación de los chavales. Sin embargo, siendo que los medios de comunicación digitales tienen una garantía de masificación de los mensajes y que debería haber una partida presupuestaría destinada a tal fin – masificación de mensajes de cultura conservacionista – deberíamos ya estar viendo esa campaña en los diferentes medios, pero nada, no hay casi nada.
El tratamiento comunicacional del COVID-19 es de vital importancia para la supervivencia, pero el AGUA lo es más aún.