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Damiá Barceló: "En los ríos urbanos hay más cocaína que ibuprofeno"

Sobre la Entidad

Redacción iAgua
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El científico Damià Barceló (Lérida, 1954), del Instituto de Investigaciones Químicas y Ambientales de Barcelona (CSIC), fue galardonado el pasado 29 de noviembre con el premio Rey Jaime I en la modalidad de Protección del Medio Ambiente, "por su contribución al desarrollo de métodos de control de los contaminantes de las aguas residuales y naturales". Ayer desgranaba en el diario Público sus puntos de vista sobre la calidad de las aguas en España, prestando una especial atención a la presencia de restos de medicamentos en los ríos españoles. La entrevista de Manuel Ansede contiene frases tan llamativas como la que titula este artículo:

¿Hay mucha cocaína en los ríos españoles?

España es el primer país consumidor de Europa y se nota. En los ríos hay unos 300 nanogramos por litro de benzoilecgonina, el principal metabolito de la cocaína. De media, es una cantidad similar a la de ibuprofeno, pero en los ríos de las grandes ciudades hay más cocaína que ibuprofeno.

¿Qué consecuencias tiene la presencia de cocaína en el agua de río? Para las personas que beben agua del grifo no hay problema, porque los niveles son muy bajos y el agua está tratada. Una dosis de cocaína son 100 miligramos y en el río estamos hablando de nanogramos, sería necesario beber 100.000 litros para notar los efectos. Para la fauna es otra historia, se ha visto que otros fármacos, como la fluoxetina (Prozac) o el antiepiléptico carbamazepina tienen efectos cardiovasculares en los peces. ¿La presencia de antibióticos es un problema mayor? Sí, sobre todo en las zonas agrícolas, por los antibióticos veterinarios. La concentración de los fármacos que se encuentran en el río varía entre 50 y 300 nanogramos por litro, dependiendo de la zona. Es más grave, porque si bebes agua con antibiótico puedes desarrollar bacterias resistentes a estos fármacos. Pero normalmente nadie bebe el agua de un río.

¿En el agua del grifo no hay vestigios de antibiótico?

El agua pasa por muchos tratamientos, no hay prácticamente ninguna traza de antibióticos. El agua del grifo en España tiene más calidad que el agua embotellada. ¿Pueden pasar estos componentes a la cadena alimentaria? Los antibióticos sí. Es un tema que nos debe preocupar. Muchos purines que se utilizan para abonar el campo se filtran y pasan a las aguas subterráneas. Un vecino de Lérida me dijo un día que tomaba agua de pozo y le respondí: "No tomes más de ese agua", porque en los pozos, además de fertilizantes y pesticidas, hay antibióticos. Antes de beber agua de pozo hay que asegurarse de que no tiene nada.

¿Existen restos de antibióticos, por ejemplo, en la fruta?

En zonas de riego, en las que haya pozos y se utilice mucho purín con antibióticos, hay posibilidades, por supuesto. En EEUU se ha comprobado que los antibióticos pasan a la cadena alimentaria. Es uno de los temas que quedan pendientes, porque en algunos cultivos se riega con aguas residuales. En hortalizas, como el tomate, es un tema delicado, porque tienen una gran cantidad de agua.

Con el envejecimiento de la población y el mayor uso de fármacos, ¿el problema irá a peor?

Sí, España es un país de vacaciones para jubilados y también tenemos el denominado turismo de hospital. La gente viene aquí a operarse porque el sistema sanitario español funciona muy bien. Este problema va a más, evidentemente, sobre todo en la costa mediterránea. Habrá que invertir más en depuradoras urbanas, porque, si no, el problema empeorará. Además, con los problemas de sequía, si hay menos agua, la concentración de contaminantes será mayor.

¿Las depuradoras españolas se han quedado obsoletas?

No, lo que pasa es que para eliminar este tipo de productos hay que invertir en tecnologías. Lo que está pasando aquí es lo mismo que sucede en Alemania, Reino Unido y otros países europeos. En Catalunya ya se han empezado a instalar depuradoras de última generación con membranas que eliminan estos contaminantes emergentes. Pero esto requiere un aumento de la inversión de la Administración. Y no sólo eso. También hay que concienciar a la gente. El 30% de los ciudadanos europeos tira medicamentos caducados por el váter y acaban en los ríos. Esto no se puede hacer.

¿Las Administraciones públicas están minusvalorando el problema?

Lo saben, aunque quizá no tienen toda la información disponible en la actualidad. En este ámbito tienen que ponerse más las pilas, hay que invertir más. En España, la gran inversión de estos años han sido las desaladoras. El año que viene tendremos 1.000 hectómetros cúbicos de agua desalada. Para la próxima legislatura, el Gobierno tendrá que plantearse la mejora de las depuradoras urbanas. Pero no es sólo la Administración, también el ciudadano tiene que concienciarse y llevar los medicamentos caducados a la farmacia, en lugar de tirarlos.

Y las farmacéuticas, ¿qué actitud tienen con este asunto?

De momento, la industria farmacéutica no está comprometida en España en reducir el impacto ambiental de su actividad, aunque intentaremos que se implique más. En otros países, como Suiza, un poco más. Si comparas el ibuprofeno con el diclofenaco, comercializado como Voltarem, el primero se degrada mucho mejor. En los ríos se encuentra más diclofenaco que ibuprofeno. Una buena idea sería que los médicos recetasen medicamentos que tengan una mayor biodegradación. Pero esto implica utilizar unas marcas más que otras y hay muchos intereses. El tema de la biodegradación recuerda a lo que ocurrió con los detergentes. Después de recibir mucha presión, las empresas fabrican ahora detergentes muy biodegradables.

¿Puede haber contaminantes en el agua inimaginables hoy en día?

Puede ser, claro. Por ejemplo, queremos estudiar los nanomateriales, que cada vez se utilizan más, como en las cremas solares. En EEUU ya se está investigando, pero aquí vamos un poco retrasados. Siempre hay temas nuevos. Hay nanopartículas incluso en los calcetines y cuando se lavan van a parar al agua. Lo importante es que la gente no se asuste. Simplemente, necesitamos conocer más el problema para poder encontrar soluciones.

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